lunes, 25 de abril de 2011

Capitán Grogniet

Fue un bucanero francés que para 1683, navegaba en compañía del también pirata francés L'Escayer y doscientos marinos franceses y ochenta ingleses.

En 1685, se unió a los capitanes ingleses Davis and Swan para participar del cerco que sostuvieron a la ciudad de Panamá y del fallido ataque a la Flota del Mar del Sur, que recolectaba los tesoros españoles durante la primera mitad de ese año, hasta que por divergencias entre las tripulaciones hicieron que Grogniet  se separa de Davis en Quibo, dedicandose al asalto de diferentes ciudades.   Posteriormente decide, atacara nuevamente Quibo, siendo descubierto por un contingente español, que quemó su nave, lo que lo mantuvo en tierra por un largo periódo, hasta que fueron rescatados por el Capitán Townley, quien navegaba rumbo a las costas de Panamá, para luego dirigirse a Nicaragua.

Sparado de Townley, en mayo de 1686, Grogniet cruzó el Istmo del Darién con 170 marineros franceses, manteniéndose activo en el Pacifico durante varios meses, hasta que se uni{o nuevamente a un grupo de ingleses para saquear nuevamente la ciudad de Guayaquil.

Durante esta balalla, fue herido de gravedad, muriendo pocos días después.

miércoles, 20 de abril de 2011

El primer inglés en surcar el océano Pacífico


Si bien es cierto que Francis Drake pasó frente a la costa Pacífico del istmo en 1579, y que Henry Morgan quemó la ciudad de Panamá en 1671, no fueron los primeros y mucho menos los únicos en navegar por estas aguas.

El primer extranjero en cruzar y navegar el Mar del Sur, fue el corsario John Oxenham, quien fuera lugarteniente de Drake en su ataque a Nombre de Dios, y llegó al istmo en 1576, dirigiéndose a Puerto Faisán, (sitio descubierto por Drake a mediados de 1573) donde esconde su nave, y encuentra el apoyo de los jefes cimarrones Luis de Mozambique y Diego, con quienes había trabado amistad, durante los tiempos en que se encontraba bajo las órdenes de Drake.  Éstos, le informaron que el ataque y captura de las recuas de mulas que transportaban el oro, ya no serían tan fácil como antes, puesto que ahora atravesaban el istmo.  Además, que los españoles habían adoptado enviar un gran contingente de soldados junto a las recuas, y construyeron puestos de observación, como consecuencia de las primeras incursiones.

Decide pues dirigirse al Mar del Sur, en una ruta similar a la utilizada por Balboa (sino la misma) hacía más de sesenta años;  partiendo de Acla, siguiendo luego  el curso del río Balsas y otros brazos de agua donde había un asentamiento español dedicado a la producción de madera (Escuchadero) en el Golfo de San Miguel. Allí robaron herramientas y madera y construyen unas pinazas,  siendo la de mayor tamaño de 45 metros con las que incursionó por las Islas de las Perlas, donde saqueó  la iglesia, las pesquerías, robó esclavos negros y apresó numerosas embarcaciones entre otras un navío de Quito con más de cuatro mil pesos del Rey y otros cincuenta mil, pertenecientes a mercaderes particulares.  Desistió de atacar a la ciudad de Panamá porque encontró que la guarnición española lo estaba esperando.

Para ponerle fin a los pillajes de Oxenham, el cabildo de la ciudad de Panamá sugirió a la corona que enviase cuatro galeones que sirvieran como guardacostas.  Sin embargo, fue el Presidente de la Real Audiencia Gabriel Loarte quien encomendó con ese propósito a Don Pedro Ortega Valencia, quien era factor y veedor de la Real Hacienda, (y que posteriormente se destacó en las guerras contra los cimarrones) con una escuadra de fragatas y otras embarcaciones menores tripuladas por soldados. Ortega Valencia efectuó una búsqueda minuciosa por diversos ríos y ensenadas en el Golfo de San Miguel y atacó sorpresivamente un campamento en el que estaba una treintena de ingleses y alrededor de ochenta cimarrones.

En la escaramuza, murieron veinticinco corsarios, y a cambio de merced; tomó  las declaraciones de algunos prisioneros con las que pudo recuperar gran parte del botín que aquel había enterrado, así como destruir dos pinazas que los corsarios tenían ocultas en Acla.

Finalmente una expedición enviada desde El Callao a cargo de Diego Frías de Trejos,  en abril de 1578 hizo prisionero a Oxenham, junto con diecisiete de sus hombres y unos cuarenta cimarrones. Estos últimos se restituyeron a sus dueños, mientras que los ingleses fueron ahorcados; exceptuando a Oxenham y cuatro de sus lugartenientes (entre los que se encontraban Butler y Thomas Sherwell), quienes fueron llevados al Perú, y encerrados en las cárceles de la Santa Inquisición de Lima hasta finales de 1580, donde fueron condenados a muerte; convirtiéndose así en los primeros piratas ingleses capturados y ejecutados en Tierra Firme.
Oleo titulado "The Sea Captain John Oxenham Enjoying a Tankard of Sack with His Fellow Sailors", pintada por  N. C. Wyeth. (1922)


sábado, 16 de abril de 2011

Celebración del 485 aniversario del Contrato de Panamá

El pasado 11 de marzo "El Contador de Historias", tuvo el agrado de hacer un programa especial, dedicado a la firma del "Contrato de Panamá" o "Contrato para la Conquista del Imperio del Perú"

Si no me equivoco, creo haber sido el único en conmemorar el aniversario de uno de los hechos más importantes ocurridos en el istmo, durante la colonia española.

Dicho acuerdo, fue suscrito entre los capitanes Francisco Pizarro, Diego Almagro y Don Hernando de Luque en la ciudad de Panamá (hoy Panamá La Vieja) el día 10 de marzo de 1526.


Grabado realizado por Theodore de Bry, donde se aprecia a Pizarro, Luque y Almagro (S. XVI)

A continuación, transcribo la "Escritura de compañía entre según se halla en los Anales de don Fernando Montesinos, año de 1526".


En el nombre de la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres personas distintas y un solo Dios verdadero, y de la santísima Virgen nuestra Señora, hacemos esta compañía.

Sepan cuantos esta carta de compañía vieren cómo yo don Fernando de Luque, clérigo presbítero, vicario de la santa iglesia de Panamá, de la una parte; y de la otra el capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro, vecinos que somos en esta ciudad de Panamá, decimos:

Que somos concertados y convenidos de hacer y formar compañía, la cual sea firme y valedera para siempre jamás en esta manera: Que por cuanto nos, los dichos capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro tenemos licencia del señor gobernador Pedro Arias de Avila para descubrir y conquistar las tierras y provincias de los reinos llamados del Perú, que está, por noticia que hay, pasado el golfo y travesía del mar de la otra parte; y porque para hacer la dicha conquista y jornada y navíos y gente y bastimento y otras cosas que son necesarias, no lo podemos hacer por no tener dinero y posibilidad tanta cuanta es menester, y vos el dicho don Fernando de Luque nos los dais porque esta compañía la hagamos por iguales partes, somos contentos y convenidos de que todos tres hermanablemente, sin que hayan de haber ventaja ninguna mas el uno que el otro, ni el otro que el otro, de todo lo que se descubriere, ganare y conquistare y poblare en los dichos reinos y provincias del Perú. 

Y por cuanto vos el dicho don Fernando de Luque nos disteis, y poneis de puesto por vuestra parte en esta dicha compañía, para gastos de la armada y gente que se hace para la dicha jornada y conquista del dicho reino del Perú, veinte mil pesos en barras de oro y de á cuatrocientos y cincuenta maravedís el peso, los cuales los recibimos luego en las dichas barras de oro, que pasaron de vuestro poder al nuestro en presencia del escribano de esta carta, que lo valió y montó; y yo Hernando del Castillo doy fe que los vide pesar los dichos veinte mil pesos en las dichas barras de oro, y lo recibieron en mi presencia los dichos capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro, y se dieron por contentos y pagados de ella. 

Y nos los dichos capitanes Francisco Pizarro y Diego de Almagro ponemos de nuestra parte en esta dicha compañía la merced que tenemos del dicho señor Gobernador, y que la dicha conquista y reino que descubrirémos de la tierra del dicho Perú, que en nombre de su majestad nos ha hecho, y las demás mercedes que nos hiciere y acrescentare su majestad y los de su consejo de las Indias de aquí adelante, para que de todo goceis y hayais vuestra tercera parte, sin que en cosa alguna hayamos de tener mas parte cada uno de nos, el uno que el otro, sino que hayamos de todo ello partes iguales. Y mas, ponemos en esta dicha compañía nuestras personas y el haber de hacer dicha conquista y descubrimiento con asistir con ellas en la guerra todo, el tiempo que se tardare en conquistar y ganar y poblar el dicho reino del Perú, sin que por ello, hayamos de llevar ninguna ventaja y parte mas de la que vos el dicho don Fernando de Luque lleváredes, que ha de ser por iguales partes todos tres, así de los aprovechamientos que con nuestras personas tuviéremos, y ventajas de jas partes que nos cupieron en la guerra y en los despojos y ganancias y suertes que en la dicha tierra del Perú hubiéremos y gozáramos, y nos cupiere por cualquier via y forma que sea, así á mí el dicho capitan Francisco Pizarro como á mi Diego de Almagro, habeis de haber de todo ello, y es vuestro, y os lo darémos bien y fielmente, sin desfraudaros en cosa alguna de ello, la tercera parte; porque desde ahora en lo que Dios nuestro Señor nos diere decimos y confesamos que es vuestro y de vuestros herederos y sucesores, de quien en esta dicha compañía sucediere y lo hubiere de haber, en vuestro nombre se lo darémos, y le darémos cuenta de todo ello á vos y á vuestros sucesores, quieta y pacíficamente, sin llevar mas parte cada uno de nos que vos el dicho don Fernando de Luque y quien vuestro poder hubiere y le perteneciere; y así de cualquier dictado y estado de señorío perpetuo ó por tiempo señalado que su majestad nos hiciere merced en el dicho reino del Perú, así á mí el dicho capitan Francisco Pizarro, ó á mí el dicho Diego de Almagro, ó á cualquiera de nos, sea vuestro el tercio de toda la renta y estado y vasallos que á cada uno de nos se nos diere é hiciere merced, en cualquiera manera ó forma que sea, en el dicho reino del Perú, por via de estado ó renta, repartimiento de indios, situaciones, vasallos, seais señor y goceis de la tercia parte de ello como nosotros mismos, sin adicion ni condicion ninguna, y si la hubiere y alegáremos, yo el dicho capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro, y en nuestros nombres nuestros herederos, que no seamos oidos en juicio ni fuera dél, y nos damos por condenados en todo y por todo, como en esta escriptura se contiene, para lo pagar y que haya efecto; y yo el dicho don Fernando de Luque hago la dicha compañía en la forma y manera que de suso está declarado, y doy los veinte mil pesos de buen oro para el dicho descubrimiento y conquista del dicho reino del Perú, á pérdida ó ganancia, como Dios nuestro Señor sea servido, y de lo sucedido en el dicho descubrimiento de la dicha gobernacion y tierra he yo de gozar y haber la tercera parte, y la otra tercera para el capitan Francisco Pizarro, y la otra tercera para Diego de Almagro, sin que el uno lleve mas que el otro, así de estado de señor como de repartimiento de indios perpetuos, como de tierras y solares y heredades, como de tesoros y escondrijos encubiertos, como de cualquier riqueza ó aprovechamiento de oro, plata, perlas, esmeraldas, diamantes y rubíes, y de cualquier estado y condicion que sea, que los dichos capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro hayais y tengais en el dicho reino del Perú, me habeis de dar la tercera parte. 

Y nos el dicho capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro decimos que aceptamos la dicha compañía y la hacemos con el dicho don Fernando de Luque de la forma y manera que lo pide él y lo declara, para que todos por iguales partes hayamos en todo y por todo, así de estados perpetuos que su majestad nos hiciese mercedes en vasallos ó indios, ó en otras cualesquiera rentas, goce el derecho don Fernando de Luque, y haya la dicha tercia parte de todo ello enteramente, y goce de ello como cosa suya desde el dia que su majestad nos hiciere cualesquiera mercedes, como dicho es. 

Y para mayor verdad y seguridad de esta escriptura de compañía y de todo lo en ella contenido, y que os acudirémos y pagarémos nos los dichos capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro á vos el dicho Fernando de Luque con la tercia parte de todo lo que se hubiere y descubriere y nosotros hubiéremos por cualquiera via y forma que sea; para mayor fuerza de que lo cumplirémos como en esta escritura se contiene, juramos á Dios nuestro Señor y á los santos Evangelios, donde mas largamente son escritos y están en este libro Misal, donde pusieron sus manos el dicho capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro, hicieron la señal de la cruz en semejanza de esta con sus dedos de la mano, en presencia de mí el presente escribano, y dijeron que guardarán y cumplirán esta dicha compañía y escriptura en todo y por todo como en ella se contiene, so pena de infames y malos cristianos, y caer en caso de menos valer, y que Dios se lo demande mal y caramente; y dijeron el dicho capitan Francisco Pizarro y Diego de Almagro: Amen, y así lo juramos y le darémos el tercio de todo lo que descubriéremos y conquistáremos, y pobláremos en el dicho reino y tierra del Perú, y que goce de ello como nuestras personas, de todo aquello en que fuere nuestro y tuviéremos parte, como dicho es en esta dicha escriptura, y nos obligamos de acudir con ello á vos el dicho don Fernando de Luque y áquien en vuestro nombre le perteneciere y hubiere de haber, y les darémos cuenta con pago de todo ello cada y cuando que se nos pidiere, hecho el dicho descubrimiento y conquista y poblacion del dicho reino y tierra del Perú; y prometemos que en la dicha conquista y descubrimiento nos ocultarémos y trabajarémos con nuestras personas sin ocuparnos en otra coca hasta que se conquiste la tierra y se ganare, y si no lo hiciéremos seamos castigados por todo rigor de justicia por infamias y perjuros, seamos obligados á volver á vos el dicho don Fernando de Luque los dichos veinte mil pesos de oro quede vos recibirnos. 

Y para lo cumplir y pagar y haber por firme todo lo en esta escriptura contenido, cada uno por lo que le toca, renunciaron todas y cualesquier leyes y ordenamientos y pragmáticas, y otras cualesquier constituciones, ordenanzas, que estén fechas en su favor y cualesquiera de ellos, para que aunque las pidan y aleguen, que no les valga. Y valga esta escriptura dicha y todo lo en ella contenido, y traiga aparejada y debida ejecucion, así en sus personas como en sus bienes, muebles y raíces, habidos y por haber; y para lo cumplir y pagar, cada uno por lo que le toca, obligaron sus personas y bienes habidos y por haber, seguir dicho es, y dieron poder cumplido á cualesquier justicias y junces de su majestad para que por todo rigor y mas breve remedio de derecho les compelan y apremien á lo así cumplir y pagar, como si lo que dicho es fuese sentencia definitiva. de juez competente pasada en cosa juzgada; y renunciaron cualesquier leyes y derechos que en su favor habian, especialmente la ley que dice que general renunciacion de leyes no vala. 

Que es fecha en la ciudad de Panamá á diez dias del mes de marzo, año del nacimiento de nuestro Salvador Jesucristo de mil quinientos vente y seis años: testigos que fueron presentes á lo que dicho es, Juan de Paliés y Alvaro del Quiro y Juan de Vallejo, vecinos de la ciudad de Panamá; y firmó el dicho don Fernando de Luque, y porque no saben firmar el dicho capitan Francisco Pizarro, y Diego de Almagro, firmaron por ellos en el registro de esta carta Juan de Panés y Alvaro del Quiro, á los cuales otorgantes yo el presente escribano doy fe que conozco.-Don Fernando de Luque - A su ruego de Francisco Pizarro, Juan de Panés, y á su ruego de Diego de Almagro, Alvaro de Quiro. -E yo Hernando del Castillo, escribano de su majestad y escribano público y del número de esta ciudad de Panamá, presente fui al otorgamiento de esta carta, y la fice escribir en estas cuatro fojas con esta, y por ende fice aquí este mi signo á tal en este testimonio de verdad. -Hernando del Castillo, escribano público.

lunes, 11 de abril de 2011

La Fortificación del Causeway de Amador


Una de las principales objeciones existentes para la fortificación del Canal de Panamá, durante sus primeros años de existencia, fue cuando el Congreso de Estados Unidos observó, que podían caer en violación del  Tratado Clayton-Bulwer, si iniciaban la construcción de instalaciones militares.


Este tratado, ratificado por los gobiernos de Estados Unidos y Gran Bretaña en 1850, dio al país norteño, el derecho de construir la vía interoceánica, con la condición de que la misma, estuviera libre de fortificaciones y material bélico, pues debía permanecer neutral, libre y abierto a los buques mercantes o guerra de todas las naciones en condiciones de igualdad. 


Viendo sus intereses afectados, el gobierno norteamericano buscó la manera para que dicho tratado fuera revocado, lo cual se logró en 1901 con la firma del Tratado Hay-Pauncefote.  En éste documento, los británicos reconocían el fin de su influencia en la región. Por otro lado, fomentaban la amistad con Estados Unidos, un aliado que debía ser tomado en cuenta debido a las tensiones que existían con el imperio alemán


En ese acuerdo, aunque se aceptaba que Estados Unidos tendría el control total del canal, también se anunciaba que todas las naciones podrían utilizarlo; además, que todas las otras grandes reconocían el derecho y la necesidad de los Estados Unidos de fortificarlo. 


Entrada la vigencia de dicho tratado, era necesario que el Canal se mantuviera abierto y neutral en términos de igualdad para los buques de todas las naciones, y se argumentaba, que la neutralidad era posible mediante un tratado internacional entre las naciones interesadas, convirtiéndose en garantes de su seguridad, tanto en tiempos de guerra como de paz.  


Algunos opinaban, que  podía utilizarse como antecedente, el tratado para la protección del Canal de Suez, el cual era respaldado por el poderío naval de Gran Bretaña y su control de los Mares Mediterráneo y Rojo; y que Estados Unidos podría acogerse a un tratado similar, bajo condiciones de la paz universal; sin embargo, la Gran Guerra era inminente, y con frecuencia las naciones participantes ignoraban todos los tratados y leyes.


Estados Unidos, sostenía que los tratados sólo son eficaces,  cuando se tiene el poder de hacerlos cumplir; y la fortificación del área canalera era necesaria para mantener la neutralidad.  Además de que con ésta acción, aumentaba su eficacia y ventaja naval; pues, quien tuviera el control de dicha vía marítima, tendría una gran ventaja estratégica sobre las demás potencias. 


Sabiendo esto, los norteamericanos tenían claro, que un enemigo trataría de controlar dicho paso, existiera o no tratado; y que debían proteger su “inversión” pues el Canal había sido construido con dinero estadounidense. Por ello, sostenían que el mantener la neutralidad del Canal, no significaba estar obligados a mantenerlo abierto a un enemigo, y permitir que fuerzas agresoras, pasaran delante de sus narices con la finalidad de bloquear o bombardear alguna de sus ciudades. 


Por estas razones, el gobierno norteamericano, autorizó la construcción de diversas reservaciones militares a lo largo de la franja canalera, incluyendo la Calzada de Amador.


A continuación, incluimos algunas imágenes sobre la disposición de las reservas militares en la Calzada o Causeway de Amador:


Localización de las Baterías Costeras de los Fuertes Grant, Kobbe y Amador


Alcances de tiro de las diversas baterías en la costa del Pacífico



Letrero que señalaba la localización de la Batería Newton, en Isla Perico


Cañón de 16". Pieza de artillería, posiblemente localizado en Isla Perico



Entrada al Bunker de la Batería Newton, Isla Perico (c. 1965)


Sección de la Boca del Cañon de 16" de la Batería Newton


Arriba y Abajo: Baterías Prince, Merrit y Carr. Isla Flamenco, 1939 




Vista de los bunkers de la Baterías antes mencionadas.


Arriba y Abajo: Plano y Cañon de Riel de 14" instalado sobre plataforma giratoria, Isla Culbera




Batería Warren, Isla Flamenco 1939

viernes, 8 de abril de 2011

Orígenes de la Calzada de Amador

El pasado lunes, comenté en "El Contador de Historias" sobre la construcción y utilización de la Calzada de Amador como punto estratégico para la defensa del Canal de Panamá durante las dos guerras mundiales. 

La idea de unir las islas que conformaban el puerto de Panamá, fue sugerida por la Compañía del Ferrocarril, en 1867; sin embargo, no pudo concretizar su construcción debido a la falta de recursos económicos.

En 1907, los ingenieros norteamericanos se encontraron con un inconveniente logístico enorme durante la construcción del Canal; ya que las avalanchas de lodo y piedra; se convirtieron en una constante, y debían encontrar donde ubicar 18 millones de yardas cúbicas de material excavado del Corte Gaillard o Culebra. 

Fue así que al presentarse este inconveniente fortuito, decidieron realizar la obra sugerida por la Compañía del Ferrocarril y unir las islas a través de un camino; y con ellos dar solución a los problemas de acumulación de sedimentos  debido a las corrientes submarinas que afectaban las navegación en el área, con la creación de un rompeolas; y eliminaban grandes cantidades de piedra y tierra de la zona de trabajo de la construcción. 

Esto dio como resultado la creación de un rompeolas de 6 kilómetros de largo, el que sería utilizado para recreación, pero que finalmente se utilizó como sitio estratégico de defesa del Canal y se establecieron fuertes militares y se colocaron emplazamientos antiaéreos en las islas de Naos, Culebra,  Perico y Flamenco.


Vista desde la terminal Pacífico de la Compañía del Ferrocarril. Al fondo, se aprecia el Puerto de Perico



Amador en 1908. Foto tomada desde el Cerro Sosa



Amador en 1913. Foto tomada desde el Cerro Sosa




Construcción del caballete visto desde isla de Naos


Vista de islas Culebra y Naos. Tomada desde isla Flamenco

martes, 5 de abril de 2011

La Verdadera Historia de la nave "Satisfaction"

En la entrega anterior, incluí un artículo que me hizo llegar mi secuaz Donald, el cual podrá encontrar  en el siguiente link:


http://www.panama-guide.com/article.php/20110228091556742?query=cannons



Se menciona en este artículo, que los cañones encontrados podrían pertenecer a los barcos comandados por el capitán galés Henry Morgan.  Señala también este escrito, que además del barco insignia del propio Morgan, otras tres naves tuvieron el mismo destino de encallar en dicho arrecife.


Me parece prudente debido a la importancia de dicho hallazgo, remitirnos a lo escrito por uno de los testigos presenciales del hecho.  Me refiero al cirujano de a bordo y biógrafo de Morgan, Alexander Olivier Exquemeling (conocido también, como John Exquemeling), quien publicó en 1679, un libro titulado "Los Bucaneros de América" en donde ofrece detalles con respecto a este naufragio múltiple, el cual  ocurrió entre la noche del 15 de enero o a las primeras horas del 16 de enero de 1671.


Luego que el encargado de la toma del Castillo San Lorenzo de Chagres, el Capitán Joseph Brodely, (quien moriría en el sitio) cumpliera con su orden, y después de una gran pérdida de hombres, arribó a las costas de Portobelo, el capitán Morgan; junto con el resto de su flota, procedentes de la isla de Santa Catalina luego de ocho días de ausencia,  "...y viendo el estandarte inglés levantado sobre el castillo, fue tanto el regocijo que tuvieron, que no advirtieron la entrada de la ribera, en la cual perdió el mismo navío en que iba y otros tres de su flota, siendo tan afortunados, que toda la gente se salvó con todos sus bienes; y hubieran, también, preservado los navios si una grande viento de norte no se levantara en aquella ocasión, que los hizo dar contra una roca que está a la entrada de dicha ribera".


Con respecto al barco insignia de Morgan,  al que se refiere el artículo es el "Satisfaction". 


Sobre esta embarcación, se sabe que a mediados de 1668, el buque "Oxford", que era un buque de guerra enviado para la defensa de Jamaica por el gobierno británico (y que a finales de ese año, pasaría a ser el buque insignia "original" de Morgan), se encuentra con la nave corsaria francesa "Le Cerf Volant" (El Ciervo Volador). 
El capitán del Oxford, que provenía de Virginia, había acsado al buque francés de piratería, por lo que el "Le Cerf Volant", fue detenido y tomado como botín de guerra por el Tribunal del almirantazgo de Jamaica.


En 1669, durante una reunión de la "Hermandad de la Costa", Morgan navegó con diez buques hacia  la  isla Vaca, localizada frente a las costas de La Española (actual Haití), lugar donde el Oxford,  voló por los aires debido a una incendio accidental que  llego a los barriles de pólvora, muriendo en este hecho 250 hombres, mientras que Morgan cenaba en el camarote, del "Le Cerf Volant", el cual a partir de ese instante, se convirtió en su insignia y fue rebautizad como "Satisfaction".


Haga click en el siguiente enlace para descargar "Los Bucaneros de América".  El documento está escrito en inglés, y puede desacrgarse como PDF o  DOC:

http://www.mobileread.com/forums/showthread.php?t=56837



Descubren cañones en el Río Chagres.


Este artículo, me lo hizo llegar mi amigo, compañero de trabajo y de clases Donald López...a quien le doy infinitas gracias por su valioso aporte...


Texas State researcher helps find pirate cannons

Tuesday, April 05 2011 @ 11:10 AM EDT
Contributed by: Don Winner
Views: 61
History & Reference


By Roy Bragg - 
SAN MARCOS — Six deteriorating pirate cannons, discovered by a team that included a Texas State University researcher, will help Panamanian antiquities experts tell the history of that nation. The cannons, found in September in the muck at the mouth of the Chagres River, are thought to be from the deck of ships led by legendary pirate-for-hire Capt. Henry Morgan, who was en route to raid Panama Viejo — now called Panama City — in 1671. Instead, says Frederick Hanselmann, Morgan's flagship ran into a reef. Then, like a nautical rumba line gone bad, three of his other ships either ran into the same reef or into each other trying to avoid it. All of them sank, depositing the cannons and everything else on the ocean floor. Undaunted, Morgan took his remaining ships to the city and sacked it. The discovery of the 340-year-old weapons, which are now in Panama's possession and being preserved, is an important find, says Hanselmann, the school's chief underwater archaeologist. “It was an important event in the development of the country,” he said. “It's a major find for the country. It's a major find for the people.”


 William B. Lees, president of the Society for Historical Archaeology, agreed: “It's part of a bigger story,” he said. “It's part of a nation's view of itself.” The ultimate goal of archaeology, Lees said, isn't to find interesting stuff, but rather to find tangible proof of historical events. The past is complicated, with multiple narratives that sometimes present a murky or unclear version of history. Archaeologists find tangible proof of those stories. “With archaeology,” he said, “you have a more objective set of information. It's stuff that was left behind. It doesn't tell the story. It is the story.” (more)
Hanselmann was part of a team, including researchers from the Office of National Marine Sanctuaries, an agency under the National Oceanic and Atmospheric Administration, and the Waitt Institute for Discovery, a San Diego, Calif.-based nonprofit, that began studying Morgan's raid two years ago.
Researchers pored over archives and memoirs in European libraries and studied the history of the geopolitical world at that time.
The Spanish ran the New World. England, their major rival/nemesis, wanted a piece of the action. Rather than wage conventional war, England hired pirates, who were essentially mercenaries with their own ships, to gum up Spain's efforts.
Morgan — yes, the same guy from the rum commercials — was one of those pirates for hire. He was helping disrupt Spain's control of the New World and, in this instance, was concerned with the strategic importance of the Isthmus of Panama.
After gathering the anecdotal information, Hanselmann said, researchers conducted a visual survey of the site. They found the reef and undertook a snorkeling tour of the area.
The site showed evidence of looting and tampering, such as holes in the reef where treasure hunters had used explosives to help them find lost pirate booty.
Treasure hunters want shiny stuff that will sell well on eBay, Hanselmann said, and don't care about more historically significant finds. But they can cause damage to those items in the process.
Hanselmann's crew originally found eight cannons in the sand and under rocks. They came back last year to grab them and preserve them, but found only six. He doesn't know where the other two went, but he theorizes that active currents in the waters may have moved them.
The iron cannons are consistent with weapons that would've been found on a pirate ship of that time: small and mobile.
Military cannons, Hanselmann said, were huge and mounted to the deck, meant to sink an enemy's ship. The pirate cannons, however, were engineered to damage a ship and cause the crew to surrender.
Experts are now using a painstaking process of removing corrosive chemicals from the molecular structure of the cannons' iron barrels. When that's finished, the items will go on display in a Panamanian museum.
Hanselmman and his co-researchers, meanwhile, will return to the water later this year to do a more exhaustive survey of the wreckage. He's not sure what the team will find, or even if they'll ever be able to prove conclusively that they've got Morgan's wreckage.
“You're never 100 percent certain,” he said, “unless you find a bell with the ship's name engraved on it.” (My San Antonio.com) 

Turismo Histórico Cultural

¡Hola a todos!


Me han preguntado en algunas ocasiones ¿Por qué decidí incursionar en un programa de radio de turismo histórico cultural?

La respuesta es simple...soy un convencido, que Panamá es por lejos, muchísimo más que un Canal. Y si hay algo que posee este pequeño pedacito de tierra al que llamamos "Patria", es historia en abundancia, y gran parte de ella, es completamente desconocida tanto para nacionales como para extranjeros.


El turismo histórico cultural, trata de revalorizar no tan solo un museo, paisajes, obras de arte, sino que también hechos históricos ocurridos en la localidad, industrias que se encuentren en la actualidad funcionando o que en algún momento participaron en el desarrollo local, las comidas, fiestas populares del lugar o la región, entre otras muchas cosas.

Por esa razón, quiero presentarles mi segmento de Turismo Histórico Cultural, dentro de Aló Turismo...este espacio se llama "El Contador de Historias".  La finalidad de éste espacio, es dar a conocer toda la riqueza patrimonial que posee Panamá sea intangible o tangible.  

Para comprender mejor éstos términos, haré una breve definición de los mismos:

El Patrimonio Intangible: 

Son todas las vivencias trasmitidas de generación en generación de forma oral, tales como: la música, las
leyendas, las fábulas y los cuentos.  Su estudio es de vital importancia para conocer el pasado y definir la
identidad cultural de un pueblo.  Este tipo de bienes son difíciles de conservar, ya que sufren  constantes cambios y modificaciones. Dichos cambios, deben ser considerados como enriquecimiento de las tradiciones; siempre y cuando se relacionen con las nuevas ideas y los progresos técnicos de cada tiempo.


El Patrimonio Tangible:


Son las edificaciones y objetos representativos de una determinada época o cultura que merecen ser rescatados, protegidos, conservados y estudiados.  Pueden ser edificaciones grandes o pequeñas,  utensilios domésticos de piedra, hueso, arcilla, porcelana o cualquier otro material, los cuales son testimonio evidente y fuentes importantes de información sobre las ideas,  técnicas y formas de vida de una época o cultura
determinada. El reconocimiento de una manifestación como patrimonio cultural se lo da la comunidad local en
primera instancia al conocerlo y valorarlo. Luego lo hace la sociedad general o lo declara así una institución
especializada en el tema.


El único programa especializado en turismo en todo Panamá!!!

Te invito a que escuches de lunes a viernes, de 9:00 a 9:45 A.M. por RCM Radio 106.1, nuestro programa 
Es un programa, donde especialistas en diversas áreas de esta creciente actividad, te damos a conocer los destinos, fiestas, ferias y toda la información y noticias de actualidad relacionadas con éste importante sector económico.

Piratas de Verdad, Verdad!!!

Apreciado lector:

Antes que nada sean mis primeras palabras para agradecer tu visita. Además te invito para que participes, opines y aportes, ya que sin tu apoyo, este espacio no tendría ningún valor.

El mismo, está dedicado a  los Piratas, Corsarios, Bucaneros y Filibusteros que surcaron las aguas del Caribe y Pacífico panameño, desde mediados del siglo XVI al siglo XIX.

Aunque si bien es cierto que me encantan películas tales como: Piratas del Caribe, El Capitán Blood, El Corsario Negro, La Isla del Tesoro, La Isla de las Cabezas Cortadas, El Capitán Barba Negra, entre otras...  y que despiertan el niño que hay en mí (ya que me hacen soñar con grandes aventuras, tesoros ocultos, viajes inolvidables, lindas mujeres, además de yoho..yoho una botella de ron!!!..de seguro que a más de cuatro les pasa lo mismo);  no son más que el producto de una desbordante  imaginación.  

Aunque en algunas películas, se mencionan uno que otro nombre real, y otras son adaptaciones de la  vida de ciertos capitanes famosos; todas estas producciones tienden a convertir la vida pirata en una fantasía, llena situaciones hilarantes, donde hacen de las suyas algunos bichos de ultratumba y monstruos marinos "infaltables para darle sazón al asunto".  Tampoco puede obviarse a la damisela en peligro y/o prisionera que queda enamorada hasta el tuétano del galante capitán, y se fuga con él....eso sí, quedando este astuto marino en un ser obscenamente rico y felices comiendo perdices, por siempre jamás.

Sin embargo, olvidan mencionar que la vida de los "Lobos de Mar", fue todo menos fácil, romántica o cómoda.

La mayor de las veces, arriesgaban sus vidas para no obtener nada más que heridas, algunas de ellas muy graves, incluso hasta fatales...enfermedades, hambre y frío. Luchando por sobrevivir en naves de madera, llenas de ratas,conviviendo con animales vivos, ya que no existía refrigeración o luz eléctrica para almacenar sus alimentos,  debiendo en ocasiones tener que comerlos descompuestos.

Donde el depósito de animales se encontraban por lo general, justo encima de las literas o hamacas de la marinería, teniendo que soportar toda clase de olores, y la mesa de operaciones, era la misma donde se cortaba la carne o ser preparaban los alimentos.

Para empeorar la situación, durante las noches o días de tormenta, debían estar sumergidos en total oscuridad, puesto que la más mínima llama podía iniciar el más violento de los incendios, y teniendo que caminar doblados, ya que la altura entre puentes a veces no superaba 1.50 metros de altura

Al llegar a tierra, se veían  obligados a abandonar sus barcos,  y someterse a las más extenuantes caminatas,cruzar a pie extensas tierras, tales como la espesa selva del Darién, donde feroces fieras e indígenas belicosos estaban al acecho. Pero tampoco pudiendo usar sus armas de fuego para cazar o defenderse, ya que los españoles estaban muy cerca.

En Panamá, existe un desconocimiento generalizado sobre piratas, vida  y actividades en nuestras costas, y cuando se le pregunta a la mayoría de la población, sólo atinan a mencionar a Francis Drake y Henry Morgan.  No se conoce de nombres  tales como:  Peter Harris, Lionel Wafer, William Dampier, Jean David Nau (Alias L'Olonnais), François Grogniet (Alias Cachemerée), L'Escuyer, ente muchos otros, y es por ello que nace este blog.

Debo advertir a todo lector, que mi obligación como investigador, es narrar los hechos históricos de la manera más exacta posibles; y muchos de ellos eran hombres sin ningún tipo de escrúpulo o bondad.  Llegando a ser sanguinarios y capaces de cometer las mayores barbaries y violencias.  De ninguna manera, acepto, apoyo o enaltezco tales actos; sin embargo, la historia no es la encargada de juzgar sea para bien o para mal los hechos cometidos por los individuos que son objeto de estudio.

Hecha esta introducción, no me queda más que agradecer su apoyo, y esperando que este Blog, sea e su completo agrado.

Saludos cordiales;

El Barbas